Buscando a Dios todos los días

¿Haces tu devocional todos los días?

Te confieso que y no lo hago todos los días. Más bien, lo he hecho 2-3 veces por semana. Lo hago más regularmente cuando estoy de viaje.

Pero este año he hecho un descubirimiento triste. Lo hice cuando escuché a alguien decir que cada mañana leía la Biblia como leer el periódico. Descubrí que muchas veces, mi devocional personal no es más que eso: un momento de lectura para cumplir un requisito religioso que supuestamente se exige de todo coordinador de la Cruzada.

Esta reflexión me ha hecho cambiar completamente mi acercamiento a mi tiempo devocional. Debe ser un tiempo para reunirme con Dios, para conocerle más, para tener mayor intimidad con él. Leer o reflexionar en su Palabra es simplemente una manera de escuchar su voz en este tiempo personal con él.

Es muy fácil caer en una rutina (aunque es mejor que nada) de leer y reflexionar brevemente la Biblia. Pero es completamente diferente tener una cita personal con Dios cada mañana. Dios se convierte en el centro de mi atención. Afino mis sentidos físicos y espirituales para escuchar su voz. Mi espíritu se conecta con su Espíritu para ser transformado por su presencia viva en mí.

Debo de hacer un esfuerzo cada día para apartar tiempo con él. Es tan fácil solo tomar mi Biblia y leer el proverbio o salmo del día. Requiere más esfuerzo y concentración disponer todo mi ser a pasar tiempo con Dios, el autor y Señor de todo lo que soy.

Pero el resultado es transformador. Leer y meditar en la Biblia me cambia el pensamiento. Tener una cita personal con Dios, me cambia la vida.